"Convivo con el racismo (en) todos los partidos, pero no me siento ofendido. Los aficionados me insultan y me llaman mono", dijo el lateral derecho del Barcelona al diario Folha de Sao Paulo.
Alves se quejó de que el racismo en el fútbol español sea "incontrolable" y no vaya a acabar "nunca", a pesar de que tanto los clubes como la liga española intenten hacer "alguna cosa" para erradicarlo de los terrenos de juego.
"Sufrí mucho racismo en España. Por desgracia, ya aprendí a convivir con eso. Al principio me chocaba bastante, pero ahora no le doy importancia", agregó el internacional brasileño, que se encuentra en París concentrado con su selección para la disputa de un partido amistoso frente a Francia.
Alves también declaró que su familia se siente "triste" cuando es víctima de gritos racistas, pero rechazó la posibilidad de elevar una queja porque intenta "distanciarse de eso" y considera que esos aficionados no tienen educación.
Como jugador del Barcelona, Alves sufrió duros insultos racistas cuando disputó en abril de 2010 un partido frente al Espanyol, equipo con el que su actual club mantiene una histórica rivalidad deportiva, aunque el colegiado no reflejó ese incidente en el acta del encuentro.
Alves, de 27 años, se definió como "moreno de familia negra" y señaló que su próximo objetivo es la conquista del Mundial de fútbol de 2014 que se jugará en Brasil.
"Voy a trabajar de la mejor manera posible en los próximo años para llegar bien al Mundial. En el último campeonato mundial hicimos un trabajo espectacular, pero faltó rematarlo con el título", manifestó el lateral derecho de la selección brasileña.
fuente: EFE | diario Folha de Sao Paulo
No hay comentarios:
Publicar un comentario